últimamente he escrito muchas mamadas. puede que no sea últimamente sino desde siempre. supongamos que eso no importa.
los filamentos de esta luz fosforescente se han fundido con mis dendritas, por eso veo puntos rojos y amarillos cuando intento hacer una vil suma. esas microscópicas medusas mueven sus tentáculos y de repente quiero vomitar o escribir mamadas o o o ir al baño. tengo que atravesar veinte cubículos y dos puertas de seguridad para llegar al escusado. cuando regreso ya se me olvidó lo que quería escribir y mejor le doy al trabajo. por la noche pienso una historia y la voy olvidando al mismo tiempo. cada miércoles voy por leche y cigarros. regreso a casa y prendo uno y otro y otro. me tomo medio vaso de leche y luego intento dormir. las dendritas iluminadas no saben que ya son las 12 y tengo que descansar. mi amiga dice que me veo deteriorada. pues es un pedo de comunicación, le digo. con eso cerramos el tema. vamos al cine. no puedo hoy no puedo mañana. estoy negociando que me dejen descansar un rato. al puro estilo japonés en vez de ponerse en huelga trabajan a mayor velocidad lo que produce un estado de ansiedad estresante que me entume las manos. puta, ya me aburrí de este texto.