tengo de nuevo un boleto que me lleva y trae promesas de un libro lleno de sueños y tropezones. mi corazón de pasa absorbe agua del borde en el que siempre he estado y se hincha de gozo por saber que aún hay algo en mí. siempre lo supe, nunca se lo dije, pero aún estoy viva, en joda y coleando. aquí estoy, allá voy, (con una cama compartida de la que a veces soy despedida y tantas otras devorada) me llevo mi cabeza que cada vez pregunta menos y acepta más. esos días que vendrán, eso que vendrá, espero que se quede aquí.