domingo, junio 07, 2009

una mujer sin edad
libre de reloj y calendario
se extiende entre las calles sucias
siempre en búsqueda del hombre que la encadene a un sueño.

es ella y somos todas
en noches eternas de ojeras y esperas
asomadas en la ventana
la vemos pasar y decimos hola
para librarnos de su eterna presencia.

yo soy el signo, la marca
la una y diez
la despedida que a diario llega
el saco lleno de momentos
la historia que trituro en cada letra.

así de noche enciendo otro cigarrito
y escucho la tos del hombre que todas compartimos
esa cadena que nos une por la cintura
envejeciendo nuestro vientre
matando nuestra cordura
marcándonos con el papel a sustituta.