martes, agosto 25, 2009

cuando les quise contar sobre el adolescente que se retorcía en el asiento del metro, llorando y subiendo el cuello de su chamarra hasta arriba de la nariz, me dijeron que era un emo y esas historias no les interesaban. yo no creo que el pobre, delgadísimo y con anteojos, se inventara el sufrimiento. estaba sentado, trataba de contenerse, de no hacer erupción y yo, hipnotizada por ser testigo de tal poder de contensión, inventaba la fuente de aquél tormento. caramba, algo fuerte tenía. vi que su cuerpo parecía dividido por algo, porque la parte superior sufría y se convulsionaba levemente, mientras que sus piernas permanecían tranquilas y por momentos, su tenis converse acariciaba el tubo del que me sostenía. a punto de llegar a la estación zócalo se limpió las lágrimas, apenas con la punta del dedo medio y sin hacer grandes movimientos. nos bajamos juntos, él atrás de mí. la ansiedad crecía en mí, porque no podía irme sin saber qué jodidos le pasaba, porque algo de su dolor ya me apachurraba los pulmones. en seco me paré y voltee. sus pestañas húmedas chocaban con los gruesos vidrios de sus lentes, su cara pequeña brillaba de sudor y los labios delgados se apretaban contra los dientes. ¿te sientes mal? le pregunté acercándome a su oído y tocando su brazo, como signo de consuelo. ploc. un grito de dolor. se arrodilló, tomándose de mi tobillo... "me acabas de reventar el oído". lo ven, no era emo!

viernes, agosto 21, 2009

el inicio extraordinario, lento,
un paso y otro con una luna roja impregnada en tu frente
el amor hace trenzas con tus dedos y los míos
con la noche a rastras y suspiros de luz reflejados en el agua,
hablamos hasta secar los labios
hasta inundar de letras el río sena
y que todo se lo llevara la corriente entre sus ondulaciones terrosas

prefería sentarme en las bancas
y sentir tu aliento en mis ojos (húmedos en todas direcciones)
descansar del futuro
hablar, besarnos, vivir instantes robados de fotos viejas.
todos los sentimientos sin decir te amo. vamos a quemarnos -dijiste-
abriendo el portón de madera. punto de ignición y avance.
y atrás, en nuestros oídos, cantaban los rodriguez desde mi cd player de 10 dólares.
qué felicidad.

martes, agosto 11, 2009

si el camino es más largo,
si las medicinas y cremas antiarrugas me prometen bienestar
si por las noches puedo dormir sobre un colchón inteligente
y leer esos libros de fácil digestión
si la vida es tan larga, y sencilla y cómoda
por qué el té sigue amargo, la tarde solitaria, los libros apolillándose...
por qué mi lengua se enfrenta a los dientes
y los ojos se cierran pero no se pierden en el sueño
y escucho los grillos que cantan sin miedo a ser descubiertos y aplastados
por qué sigo, seguimos, sin rumbo?
(hay segundos de pura luz, cristales que viajan por el mismo bosque, una fiesta sorpresa estalla en mi corazón y aguanto, resisto la ola de felicidad. veinticinco segundos, veintiseis, trago saliva, parpadeo, laguitos en mis párpados, blink blink, se moja toda mi cara y estoy eufórica. veo el camino, el punto en el horizonte, la tarde alejándose hacia su otra casa y mis pies calientes andando, sin tropezar ni caer ni titubear straight forward. cuarenta y dos segundos después la abertura divina se cierra y checo en dónde exactamente me ha dejado.)

viernes, agosto 07, 2009

numbness

huir de este nido y de la boca que pretende alimentarme
al empapar con preguntas la glucosa transparente
-mi donación diaria de plaquetas-
que extiendo sobre mi cicatriz bulbosa
para borrar el recuerdo de una respuesta incorrecta.

esos labios que nutren y asesinan
cuando se adhieren a mi media luna
entregan sus átomos a punto de dividirse
(diente tras diente hasta mi garganta)
y la reacción en cadena principia.

antes de que todo se extinga,
de que el tazón arda y derrita las alas de mi mesías,
esparciré mi cabello en su espalda
como una neblina gris sobre la arena blanca

y cuando el pequeño nido esté a punto de explotar
lo único que buscará será mi boca
(un rocío, un sello en la rama a punto de caer
un nudo que no se suelte, el alimento que me retenga)
la unión será delicada y rápida
antes, poquito antes de quedarme otra vez entre sus ramas.

miércoles, agosto 05, 2009

'Here lies one whose name was writ in water' - Keats.



corro entre árboles y plumas
y el musgo suda a mi paso
mi cuerpo seco, impermeabale, sueña con mojarse y que algo crezca en mí,
pero estuve llorosa por años y pedí ver claro...
ahora que está todo luminoso y delineado
se ha secado el dobladillo de mis ojos
y el vientre es una oblea gigante sin un fruto bendito.

avanzo en este bosque, siempre sedienta,
con el alma revuelta de tanto sentir,
bañada en gritos absolutos
(dardos que juegan al bulleye en el corazón de cada amante)
reventada, así, fuera de mí y sin rumbo.

me detengo unas horas para escribir con mi uña sobre la corteza de los árboles que paso.
todo permanece inmóvil y abandonado
aunque este bosque tiene una vida más allá de mi vista
y genere millones de esferas de agua que jamás llegan a tocarme,
he reunido evidencia entre mis uñas de que al menos hay vida microscópica a mi alrededor
solo tengo que darle un poco de beber y puf! se expandirá hasta formar otros universos.

pero esta vida no tiene futuro, no la que está en mis manos,
no hay dios ni amenaza que condicione su existencia
así que no puedo encontrar una razón para terminar con mi sequía y volver a tí.

la noche aquí es preciosa y el cielo parece arañado por las delgadas nubes que aún existen
lo demás está lleno de brillitos
y el deseo de llorar me exprime los pulmones.
nada, no hay miel ni lágrima. seca still.
me quedaré un poco más, quizá algo se condense.

martes, agosto 04, 2009

la selección natural de la memoria me dejó lo de fácil digestión:
tiras de negativos flotan en mi cuarto, esperando la luz adecuada, mi ojo que proyecte, la saliva que revele en tu piel de papel
así las paredes volverán a su rojo 2003 y hasta las diminutas criaturas se quedarán en las esquinas, observando las imágenes que hacemos con cada beso
y todo será romántico y apasionado, desprendidos del futuro, flash flash flash,
un cuarto que no tendrá salida de emergencia
ni reloj
ni destino
ni cúpulas sagradas
sólo fotografías de eso que vivimos y que hoy se ha terminado.
la arena va cayendo, no tiene prisa por derrumbar todo, así que se lo toma con calma.
no permite que habiten el interior de su construcción,
sólo autoriza espectadores, que curiosos por ver aquella torre deshacerse sin remedio, se llevan unos granitos del material como recuerdo.
un edificio sin defensa, requemado por el sol, seco y solitario, con las cadenas que levantaban el puente rotas y un foso sin animales ni espíritus.
a veces, cuando la luna tiene su anillo rojo, la estructura cruje y ve los nuevos daños. falta poco para el derrumbe, poco para que todo acabe, sólo hay que esperar.

lunes, agosto 03, 2009

he tenido que salir
dejar el cuerpo en la oficina y el café humeante de las 8
porque quería llorar y decir a los que pasaban que yo no estaba allí
pero me detuve sólo porque me caerían a preguntas
querrían consolarme o mandarme a casa,
un lugar en el que no habito de momento
por evitar a la persona que por años equilibró la balanza.
pero en este momento, al terminar el día y la noche,
he visto que la balanza termina por caer a un lado
(siempre mi lado por todo lo que me enredo en el cuello)
y voy hacia abajo, muy cerca de la plataforma
sin querer sacar un pie me aferro a mi pequeña cama de latón y veo que él está muy agusto allá arriba...
podría confesarle algunas cosas, para equilibrar un poquito,
pero estamos tan separados
cada uno en su nivel
yo con los labios pegados y pellejudos
él "como de revista" (así me dice una, otra, otra tipa y yo pienso que eso me deja como adolescente besando un papel, ah, plano y sordo, bidimensional, si acaso vivo por un segundo para la foto, de repente puede tener sentido, pero tampoco sería verdad...)
que mejor me entretengo en mi pequeño abismo
y dejo -llorando por supuesto!- las estrías luminosas del cielo en sus ojos...
de nuevo y a fuerza de repetición sigo pensando que esto no es ni principio ni fin, que esa frase en mis costillas (¡quema las naves, quema las naves!)
no me llevará a ningún lugar y menos hoy, que estoy tan abajo...
¿cómo salir de algún lugar si no se ha pisado fondo? y ¿hasta dónde se debe bajar cuando el poco sentido se ha quedado allá arriba?

domingo, agosto 02, 2009

no he podido controlarme. el tiempo que pasó hizo que olvidara una parte de mí. esto. esto. se acumula, nace en el estómago y llega hasta mi nuca, me estira la piel, las manos tiemblan. lo creí perdido pero aquí está, hoy, casi de madrugada y no quiere apagarse. intento controlarme, digo que mañana es lunes y debo trabajar y enumero todos los pendientes y me quiero convencer de que necesito descansar. pero mi mente no domina esta parte de mí. estoy atragantada, sin saber qué es principio y fin, en qué estado me encuentro porque no me veo feliz ni triste, es como si no fuera lo uno o lo otro, nada de opuestos, pero tampoco de puntos medios; saber que hay tantas metáforas y no encontrar una para esto. no hay abismos, ni puentes tendidos, mi oído está despierto para oír el ritmo que debe seguir mi pensamiento, sólo quiere escuchar algo con sentido, con pausa y play para controlar mi cuerpo que ahora es incapaz de reclamar por su preservación. cuando me duerma sé que un poco de todo esto se habrá dormido también, pero quedará latente hasta que vuelva a reventar el dique y el torrente de ideas se encamine hacia los zurcos que hasta ahora permanecen secos. esta es la única forma de mantener el agua en calma, de cortar las corrientes antes de que invoquen a la precipitación y se alimenten unas de las otras hasta arrancarme de la inmovilidad en la que ahora me encuentro. estuve a punto de decirlo en voz alta, de confesarle a alguien más lo que adentro estaba pasando, pero no hablé, porque no había palabras como ahora tampoco las hay, porque las letras se juntan pero aún ahora siguen sin decir nada. espero que al dormir se calme esto, sólo un poco, porque también quiero algo de movimiento.